¡¡¡¡¡ Camas calientes!!!!!
La idea es que ambos disfruten, por lo que se recomienda iniciar con suaves caricias por todo el cuerpo con el fin de relajar lo. La cara, el vientre, la nuca, son lugares perfectos para tocar y masajear cariñosa-mente para luego continuar con caricias mucho más eróticas en las zonas mas calientes del cuerpo nalgas, muslos,
Dulces y sexo
Dile a tu chico que se tumbe cómodamente en la cama, coge un bote de nata montada en spray y aplícala sobre su cuerpo, desde el ombligo hasta los muslos. Empieza a lamer la crema muy despacio, alrededor del pene y los testículos. Después, bésale en la boca con los labios recubiertos del dulce y, a continuación, vuelve otra vez a la zona caliente de su cuerpo. Lámele todo excepto la nata que recubre el pene hasta que veas que ya no puede esperar y necesita que te lo comas todo, todo, todo.
El balón y la erecion
Túmbate boquiarriba con un balón grande de los que se usan para hacer ejercicios. Estira las piernas y apoya los pies en el suelo para no perder el equilibrio. Dile a tu chico que se ponga de rodillas frente a ti y que, desde esa posición, te penetre. Puede seguir de rodillas o si lo prefiere, tumbarse encima de ti haciendo presión con su cuerpo, con las palmas de las manos en el suelo para soportar el peso y mantener el equilibrio sobre el balón. Durante el acto, cógelo por el trasero o apoya las manos en el suelo para balancearte con cada uno de los movimientos.
Satisfacción sexual
Satisfacción sexual de los juegos con fresas y helado: La lengua caliente en contraste con el helado frío alrededor del pene hará que la sensación de placer y excitación sea más intensa y prolongada. Y, además, cada vez que le beses en los labios él sabrá que en sólo unos segundos volverás a colocar tu boca sobre su zona erógena por excelencia y eso aumentará aún más su excitación. Es evidente que unos besos tan íntimos en un momento tan excitante harán que su libido se dispare.
Saco de dormir
Meteos junto en un saco de dormir o enrollaos en una sábana y haz que te penetre desde la posición de la cuchara, esa en la que estáis tumbados de lado, con su pecho contra tu espalda, mientras coloca sus brazos por delante de ti.
Sentirás más placer porque los dos cuerpos están muy pegados y podrá acariciarte el pecho, la cintura y, sobre todo, el clítoris.
El calor que desprende el saco o la sábana contribuirá a que suba la temperatura corporal y a que los músculos y la piel estén más sensibles a cualquier tipo de roce o sensación.
El balancín
Esta técnica se inicia desde la postura del perrito, es decir, tú te colocas de rodillas y tu chico te penetra desde atrás. Para actualizar la versión tradicional, dile que coloque una toalla alrededor de tu cintura y coja los extremos con cada mano. De esta forma te sujetará con más fuerza y podrá elevar un poco tu trasero para controlar mejor tu cuerpo durante la penetración. El recurso de la toalla ayudará a tu chico a dirigir mejor la acción, tener más control sobre el ángulo de la penetración y el ritmo de sus movimientos. Ambos sentiréis el contacto de vuestros cuerpos durante el sexo de una forma más profunda e intensa.
¡¡¡¡ Y recuerda, no pongas limites al placer!!!!!
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